La batalla intramuros entre lo clásico y lo moderno en el diseño de interiores parece alcanzar hoy su punto álgido. El mundo parece estar dividido entre los que prefieren el lujo de los interiores clásicos y los que prefieren diseños modernos más austeros y funcionales. Las tendencias modernas son expresadas por personas acostumbradas a seguir las tendencias de la moda y que acostumbran a expresar sus preferencias en el interior de su hogar. En muchos sentidos, esta tendencia es bienvenida.
Los principales estilos de hoy en día
El estilo moderno no es un estilo independiente, sino un término colectivo que describe una serie de tendencias de diseño que comparten características comunes. Los estilos contemporáneos, como el escandinavo, el moderno, el de alta tecnología, el ecológico, el minimalista y el loft, se consideran ahora los más populares. Más información en www.diseño-interiores.com.ua/sovremennyi. En este material se discutirán las principales características que resumen las tendencias modernistas en un solo seno de estilos modernos.
Las características comunes del estilo moderno
Es justo decir que el estilo moderno es el reverso del estilo clásico. No se trata de clásicos pomposos y aristocráticos. A cambio, ofrece cualidades como la funcionalidad y la concisión. Aquí reinan la comodidad y la sensación de progresión.
Los rasgos distintivos del estilo son:
- el minimalismo;
- El rigor de la geometría;
- luz natural;
- Monocromático (un mínimo de contrastes);
- Superficies cromadas y brillantes.
Además, los interiores modernos se caracterizan por el espacio abierto, sin tabiques ni arquitectura complicada. La zonificación se lleva a cabo mediante muebles que proporcionan islas funcionales.
Veamos cada una de ellas con más detalle.
Muebles modernos
La rigidez de las formas y las geometrías se nota en el diseño de los muebles de los estilos modernos. Todos los muebles deben tener líneas suaves, sin pretensiones ni texturas pronunciadas, y deben expresar una tendencia funcional. Los transformadores de sofás y los constructores de muebles encajarán perfectamente en esta línea.
El estilo moderno no acepta ninguna superfluidad en el acabado de las superficies. Aquí rige la relativa monocromía de los colores, la máxima sencillez, la ausencia de motivos y dibujos. Las paredes se pueden pintar de un solo color, pero también se puede contrastar para conseguir un acento inteligente. Los suelos también deben ser lisos y suaves. Se puede utilizar laminado, baldosa o piedra. Los techos suspendidos o tensados completarían el conjunto.
Los principales elementos de decoración de un interior moderno
La decoración es de carácter sistemático. Se permiten los carteles gráficos, las pinturas de gran tamaño, las letras y las formas inusuales. Puede utilizar elementos repetitivos en intervalos regulares. En general, se fomenta la creatividad.