Un césped bonito es siempre una alegría para la vista y el orgullo del propietario. Hay muchos aspectos importantes en el cuidado del césped. Pero sobre todo se trata de regar correctamente. La hierba también es una planta viva y no puede vivir sin agua. Sin la humedad adecuada, la hierba se vuelve inmediatamente amarilla y pierde su hermoso aspecto.
Sistemas de riego de césped
Antes de explicar las técnicas de riego adecuadas para su césped, es importante aclarar cuáles son los sistemas de riego actuales:
– Regadera: El método más fácil y económico para regar el césped o los parterres pequeños. Regar con una regadera suele llevar bastante tiempo y requiere un gran esfuerzo físico;
– bomba y manguera. Si tienes un estanque en el lugar o acceso directo al agua, puedes regar fácilmente el césped con una bomba y una manguera. En este caso, puede utilizar una manguera con una boquilla para rociar el agua o unos aspersores especiales para césped, gracias a los cuales podrá distribuir el agua de forma uniforme y adecuada en la superficie del césped;
– Un sistema de riego profesional. Se trata de un sistema de rociadores fijos con tuberías y boquillas enterradas en el suelo. La instalación de un sistema de este tipo es compleja y no se puede prescindir de la compra de tubos de polietileno solo.com.ua.
En general, los expertos recomiendan para:
– Elija un pulverizador fijo para un césped grande;
– Una pequeña área rectangular – un aspersor con un tubo oscilante;
– Para un césped ovalado o circular, un aspersor con chorro pulsante;
– Largas y estrechas – mangueras con agujeros.
Cuándo regar el césped
En general, un césped necesita ser regado cuando la tierra se ha secado hasta 10 cm. Por supuesto, en la práctica nadie sigue estas recomendaciones. No va a desenterrar el suelo cada vez que compruebe su estado. El aspecto del césped es, por tanto, un criterio primordial para el riego. Si la hierba de su césped se vuelve opaca y grisácea con el paso del tiempo y pierde su resistencia, necesita ser regada. El riego es especialmente importante durante el tiempo seco y para los céspedes recién colocados. En cuanto a la frecuencia de riego, una vez más todo depende de las condiciones climáticas, el tipo de suelo. Si el tiempo es fresco y el cielo es variable durante mucho tiempo, puedes regar el césped una vez a la semana. En épocas de calor, cuando el sol calienta mucho y no llueve, los suelos arenosos y las zonas con tierra suelta necesitan un riego diario. Se desaconseja el riego en tiempo frío, cuando las temperaturas descienden por debajo de los +10 grados.
Pero es preferible regar el césped por la noche o por la mañana, pero nunca durante los días calurosos.
Cuánta agua se necesita para el riego
El césped debe estar bien regado, pero no inundado. Por lo tanto, dependiendo de lo seco que esté el suelo y del tipo de suelo, se recomienda verter al menos 10 litros de agua por metro cuadrado (máximo 20 litros). Si riega con una regadera, es fácil determinar la cantidad de agua que debe utilizar.
Es más complicado cuando se riega el césped con un aspersor. En este caso, hay que medir la cantidad de agua que se quiere regar al menos una vez en un tiempo determinado. También es importante tener en cuenta el tipo de suelo. Así, en los suelos sueltos y arenosos, se puede aumentar la tasa de riego y su frecuencia, y por el contrario, reducirla en los suelos arcillosos, ya que la arcilla retiene bien la humedad. También hay que tener en cuenta la posición de la superficie del césped. Si se encuentra a la sombra, donde no llegan los rayos del sol, se puede reducir la frecuencia de riego.
La regla de oro para regar el césped es siempre regar con menos frecuencia pero con moderación, en lugar de hacerlo con frecuencia pero con moderación. Regar en pequeñas dosis hará más daño que bien.